A José Manuel Caballero Bonald en el día de su muerte
(Castellar del Vallès, 09/05/2021 )
Una voz, huérfana de cuerpo, sigue viva
cuando el hálito ya solo es letra impresa
y la memoria el único hogar.
Y hoy, domingo,
ya ceniza son mis labios
y no tengo nada que perder
cuando entra la noche como un trueno.
A la espera del cuarto creciente
sigo el hilo de Ariadna
perdido en el desencuentro.
Un cuerpo está esperando
el mimetismo de la experiencia
y la botella vacía se parece a mi alma,
pero ya no tengo miedo …
Estoy a la vuelta de todo
y escucho la música de fondo
cuando solícito el silencio se desliza por la mesa nocturna.
Espera ….
Ahora ya todo es una fábula
y vivo allí donde estuve,
donde mi propia profecía es mi memoria,
sin suplantaciones,
allá en la casa junto al mar
ardiendo en el carnal fuego amoroso.
..ooOoo..